Estar a tiempo para una cita o ser puntual es algo que para los alemanes, austriacos y suizos tiene mucha importancia y hace parte de los valores que pueda tener una persona. Incluso dentro de todo su sistema de transporte está muy presente.
Aunque el tiempo sea relativo (argumento principal de la teoría de nuestro reconocido físico alemán Albert Einstein), no significa que puedas llegar tarde a un encuentro o reunión y más si se trata de alguien que nació o tiene la cultura de en uno de los países DACH.
Es por eso que debes hacer un cálculo de cuánto demoras organizando tus cosas, desplazándote y encontrando el lugar de la cita. Tanto para alemanes, austriacos como suizos estar a tiempo es 5 minutos antes de la hora acordada. Toma nota, porque hasta para el transporte debes estar “a tiempo” o si no perderás tu dinero y tu tren o vuelo.
La cultura de la puntualidad es un factor importante: por un lado expresa aprecio y respeto por la otra persona. A nadie le gusta perder tiempo esperando ¿Cierto?. Por otro lado se ve como un acuerdo, hablando en un sentido más amplio, como si fuera un contrato de palabra que por lo tanto debe cumplirse; y esto a su vez conduce a una confianza mutua.
Y si se presenta un inconveniente, nadie está salvo de ello, seguro que sabrás sí puedes llegar y cumplir con tu compromiso, casi que con una hora de anticipación suficiente para avisar a la otra persona para que no vaya a perder su tiempo.
Recuerda que el tiempo es invaluable y no se puede regresar.